Podrá ser leído por las autoridades sin tener que parar el vehículo y
contará con sistemas de posicionamiento por satélite. La llegada del
tacógrafo inteligente marcará un antes y un después.
Lectura remota en un tacógrafo de segunda generación
El tacógrafo es el gran testigo de los viajes que protagonizan todo
transportista profesional y su vehículo. Con él es posible conocer el
tiempo de actividad y el descanso del conductor, pero
además proporciona información con los datos de los kilómetros que se han recorrido y la velocidad a la que se ha circulado.
Este aparato de registro no ha dejado en ningún momento de evolucionar y
en los últimos tiempos todos los camiones cuentan con uno que funciona
de manera automática o semiautomática.
El
salto adelante llega con el nuevo tacógrafo inteligente,
conocido también como tacógrafo digital ‘de segunda generación’. Lo que
hace tan diferentes a estos nuevos dispositivos es que aprovechan las
ventajas de la conectividad. Gracias a
sistemas como el GPS y el futuro sistema de navegación Galileo, impulsado por la
UE y la
Agencia Espacial Europea,
serán capaces de ‘leer’ información de forma remota. Contarán con nuevo
sistema de control vía satélite que ofrecerá valiosa información acerca
de todos los movimientos del vehículo, todo ello en tiempo real. De
esta manera será más sencillo comparar los tiempos de conducción y
descanso.
Evitará paradas y podrá abonar peajes
A partir de su implantación
, las autoridades de control del tráfico no tendrán que inmovilizar los vehículos durante
el tiempo en que se realiza la verificación, con el consiguiente coste
debido a la parada, el nuevo arranque y el retraso sobre el horario
previsto.
Este tipo de tacógrafo inteligente estará conectado de manera inalámbrica y
no solo tendrá las aplicaciones descrita, sino que con él, además, será
posible desde realizar una reserva a distancia de un aparcamiento en
una zona conectada hasta abonar peajes telemáticos sobre la marcha.
La verificación se mantiene igual
En principio,
la verificación del tacógrafo seguirá
realizándose como hasta ahora; en el caso de que se produzca una
reparación, una nueva instalación, en cada cambio del número de vueltas
de recorrido del vehículo y en cada cambio en el perímetro de los
neumáticos que se deba a un cambio en las dimensiones de éstos.
Interés de la DGT
La manipulación de tacógrafo sigue siendo
una de las principales violaciones del reglamento de Seguridad Vial de la Dirección General de Tráfico,
que durante algunas épocas del año intensifica sus controles a
furgonetas y camiones para detectar posibles irregularidades. En estas
inspecciones sacan a la luz las dos principales causas de sanciones;
por
una parte, las que se aplican por exceso en el tiempo de conducción y,
por otra, la relacionadas con la manipulación o el mal uso del
dispositivo. A estas dos infracciones les sigue, por
frecuencia, una tercera, la velocidad inadecuada para la vía por la que
se circula o para el tipo de vehículo que realiza el transporte. La
llegada del tacógrafo inteligente permitirá un control más fiel de todos
los parámetros que afectan a la conducción y,
si es manipulado, dejará un rastro que se podrá detectar.